domingo, 10 de noviembre de 2019

Carta.-Marta Luján Falsetti.

A TI




            Cuándo el sol se esconda, seré testigo del final de otro día sin ti...pasarás a ser entonces, la razón que mis párpados abiertos excusen al llegar la oscuridad con toda su impotencia...pero al amanecer...la esperanza tendrá albergue en mí o algún inescrupuloso raciocinio la habrá aniquilado por completo?....Sólo espero que mi alma consiga liberarse de su inmensa vacuidad.







        Le he pedido al corazón que aún no se detenga...no podría partir sin haber conocido tu abrazo, sin haberte dibujado todas mis caricias.






       Dime.. con qué derecho me aferras a la vida, al tiempo que me enfrentas con ella?...eterno misterio el de tu silencio, que ahonda en mí tanta incertidumbre. Sed de mis ojos, que advierten de lejos tu imagen amada y en temeraria osadía sueñan con alcanzarla. Desesperación la de mis manos, que no pueden contener tanta ternura buscando tu piel.










      Querido hombre...cómo consigues que mis alas en letargo se abran con sólo mirarte? qué hechizo esconde tu sonrisa, que no deja de estremecerse el corazón? Si supieras que conservo cada mirada tuya en ese lugar dónde se atesora lo más amado...!









     Qué imperiosa necesidad de protegerte, cuándo tus lágrimas certifican que tienen alma! Será por la dulzura que derraman tus ojos al mirar con la profundidad de lo intangible...?










   Si bien no he podido hallar la palabra que resuma el torbellino que me invade, he intentado decirte que te amo, que te he amado siempre, y que cuando la vida se me esté escapando de las manos y mis párpados se preparen para la gran luz con toda su impotencia, pasarás a ser la razón de mi eternidad.










Hombre de mi alma, parte de mi ser...Sálvame entonces de este mundo en vana guerra, dando a mi corazón el motivo que te pide para no desistir...di tan solo la palabra, y el desierto que abunda en mí, se transformará en poema.







                                                                                      Crisol.

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